Qué es un cisne negro en economía

El concepto económico del cisne Negro fue popularizado por el ex trader Nassim Nicholas Tareb, que en 2007 utilizó una metáfora para definir un interesante fenómeno económico.

Imagina que eres un explorador europeo en el siglo XVII, has visto muchos cisnes en tu vida, y todos eran blancos. No solo tú has visto muchos cisnes y todos eran blancos, sino que toda la gente a la que conoces (e incluso todos tus antepasados) no ha visto jamás un cisne que no sea de color blanco. Para ti, no es una teoría, sino que estás completa y absolutamente convencido de que todos los cisnes son blancos, y es totalmente lógico que lo estés..

Sin embargo, formas parte del primer navío europeo que llega a Australia, y allí ves un cisne negro, uno muy real. En ese momento, tu certeza y convencimiento desaparece. Una teoría, la de que solo existen cisnes blancos, pasa de estar decenas de miles de años siendo una verdad absoluta para, en un instante, demostrarse incorrecto.

Esta metáfora sirve para definir ciertos eventos históricos con consecuencias directas en la economía, eventos muy raros o impredecibles con enormes consecuencias.

Características esenciales de un cisne negro

Para que un evento sea considerado un cisne negro en economía (y no simplemente «mala suerte»), debe cumplir de manera estricta con tres atributos fundamentales. Si no se cumple uno, no es un cisne negro.

1. ¿Es una rareza?

Habita fuera del reino de las expectativas normales. Nada en el pasado apunta de forma convincente a su posibilidad. Los modelos de riesgo tradicionales, las proyecciones bancarias y los gráficos de tendencias no lo ven venir porque operan basándose en lo que ha sucedido en el pasado.

Por ejemplo, el atentado que derribó las Torres Gemelas en 2001. Ningún modelo de riesgo geopolítico estándar tenía una variable que contemplase la utilización de aviones comerciales como proyectiles contra el corazón financiero del país más poderoso del mundo.

2. ¿Tiene un impacto extremo?

No hablamos de una pequeña variación en la inflación o de una caída puntual del 2% en el Ibex 35. Un cisne reescribe las reglas del juego. Provoca quiebras masivas, cambios de régimen, nuevas regulaciones globales y/o crisis humanitarias.

3. ¿Hay predicción retrospectiva?

Esta es una característica muy particular. Se produce un fenómeno psicológico en el que, una vez el evento ha ocurrido, la naturaleza humana (encarnada por ciudadanos corrientes y expertos) intenta encontrar explicaciones que intentan vender el «era predecible».

Por ejemplo, «estaba claro que la burbuja inmobiliaria iba a estallar«, o «era obvio que internet cambiaría el mundo«. Si hubiese sido obvio, todas las economías del mundo se habrían protegido del primer supuesto, o bien todo el mundo habría invertido dinero masivamente en productos relacionados con internet.

Este relato nos hace sentir más seguros, ya que sentimos que podemos predecir los siguientes eventos de gran magnitud, pero lo único que estamos haciendo es conectar puntos hacia atrás.

Por qué los datos nos engañan

El creador de la metáfora, Taleb, utiliza otra historia muy interesante para ilustrar por qué los economistas y analistas financieros fallamos sistemáticamente al usar datos históricos a la hora de predecir el futuro. Es la historia del Pavo de Acción de Gracias, la tradicional fiesta norteamericana.

Imagínate un pavo en una granja de Estados Unidos:

• Día 1: El granjero le da de comer, y el pavo piensa «este humano es mi amigo, me cuida y alimenta».
• Día 100: El granjero le sigue dando de comer, la confianza del pavo aumenta y los datos confirman su teoría: la vida es buena y el humano es un proveedor benevolente.
• Día 999: El pavo ha acumulado una inmensa cantidad de datos cuantitativos y cualitativos que confirman, con un 99,9% de seguridad, que el granjero vela por su bienestar. Es el día que el pavo se siente más seguro de todos.
• Día 1000: Ha llegado Acción de Gracias y el pavo es lo suficientemente grande, con lo que ocurre algo «impredecible» para el pavo: El granjero no trae comida, trae un hacha.

Ejemplos de cisnes negros que han afectado a nuestras finanzas

Para entender la magnitud de este fenómeno, vamos a ver tres eventos históricos que cumplen estos criterios y cómo afectaron a las finanzas personales de todos los españoles.

La crisis de 2008

1. La creencia previa: «Los precios de la vivienda nunca caen simultáneamente en todo el país», «los instrumentos financieros complejos (subprime) son seguros porque diversifican el riesgo.
2. El cisne: El colapso total de Lehman Brothers da la voz de alarma sobre la fragilidad del sistema bancario global.
3. El impacto: Millones de personas perdieron sus casas y empleos. Los gobiernos tuvieron que imprimir dinero como nunca antes, cambiando la política monetaria para siempre.

El boom de internet

1. La creencia previa: «El comercio físico es insustituible», «las empresas necesitan décadas para llegar a valer miles de millones».
2. El cisne: La aparición de la World Wide Web.
3. El impacto: Google, Amazon y Facebook surgieron prácticamente de la nada para dominar la economía mundial.

La pandemia de COVID 19

1. La creencia previa: «Las pandemias son cosas de la Edad Media o de países lejanos», «la economía global no se detiene por un virus».
2. El cisne: Cierre total de la economía mundial en marzo de 2020 y petróleo en precios negativos.
3. El impacto: Ruptura y/o colapso de numerosas cadenas de suministro, inflación desbocada en la resaca del estallido, popularización masiva del teletrabajo, etc.

Cabe reseñar que la pandemia de COVID 19, a ojos de muchos expertos, quizás no debería considerarse como un cisne negro. Esto se debe a que sí había indicadores y recomendaciones que advertían de la posibilidad de que esto sucediera y formas de prepararse, pero la gran mayoría de la población no era consciente.

¿Puedes predecir un cisne negro?

Si los cisnes negros son impredecibles por definición, no es posible adivinarlos. No intentes predecirlos, intenta prepararte.

Un concepto con el que se trabaja mucho al hablar de estos escenarios es el de la resiliencia. Lo opuesto a frágil no es algo duro, sino algo capaz de soportar los golpes. ¿Cómo puedes aplicarlo? Taleb recomienda que lo hagas mediante la Barbell Strategy.

Esta estrategia consiste en invertir el 90% de tu capital en activos ultra seguros, como bonos del tesoro a corto plazo, depósitos garantizados, etc. Por otro lado, recomienda invertir el 10% de tu capital en activos de riesgo máximo con potencial de crecimiento muy elevado, como criptomonedas, startups, etc.

Otras recomendaciones bastante habituales son reducir tu deuda todo lo posible, diversificar tus habilidades profesionales (para poder encontrar otro oficio si el tuyo deja de ser tan demandado) y, evidentemente, que crees un fondo de emergencia.

Preguntas frecuentes sobre el cisne negro